martes, 12 de junio de 2018

Una organización donde hay luchas internas no puede subsistir

UNA ORGANIZACIÓN DONDE HAY LUCHAS INTERNAS NO PUEDE SUBSISTIR
Proyecto: BibliaKeting
(Biblia y Marketing)
11 de Mayo de 2018

Evangelio según San Marcos 3,20-35.
… “Jesús los llamó y por medio de comparaciones les explicó:
¿Cómo Satanás va a expulsar a Satanás?
Un reino donde hay luchas internas no puede subsistir.
Y una familia dividida tampoco puede subsistir” ..
.

BibliaKeting:
“Luchas internas” y “familia dividida” son las expresiones clave en este pasaje.
Toda organización, empresa y marca pretende, con sus estrategias y actuaciones en el mercado, ser la elegida, la preferida, la líder en cuota de mercado, en el corazón y la mente de su grupo objetivo. Para esto debe luchar de manera inteligente contra sus competidores que, sin duda, tienen los mismos deseos y objetivos.
Para gestionar con éxito esta situación resulta evocador el dicho de que: “la unión hace la fuerza”. Es la unión de toda la empresa, departamentos, y personas … unidas en un objetivo y propósito común, lo que permite poder librar esta batalla con alguna garantía de éxito.
El texto Bíblico previene de las “luchas internas” y de las “divisiones”. Indica que en estas circunstancias “Un reino … no puede subsistir”. Este es el castigo a la lucha interna, a la división: la desaparición. Tal vez hay empresas, marcas que ¿han desaparecido por estas circunstancias?
La experiencia, lamentablemente, nos indica que estas luchas internas y divisiones son el aire que habitualmente se respira en la mayor parte de las empresas. Parece un contrasentido, pero es así: tus mayores enemigos no están en el mercado, no es tu competencia, … son los “otros” de tu empresa. Los “nosotros” contra los “ellos”. El lenguaje no es neutro.
Esta situación no sólo es comprobable por la experiencia personal de muchos de nosotros, sino que también es corroborada por una importante cantidad de literatura académica y de divulgación, en el mundo del marketing, empezando como ejemplo por; Kotler, Rackham y Krishnaswamy, en su artículo: “Cómo terminar la guerra entre ventas y marketing”, y en área de las personas, continuando con Muriel en su libro: “Esta empresa es un zoo”… Entre otros, y para no poner más ejemplos.
Que marketing y ventas se llevan mal es sabido. Que finanzas se lleva mal con todos los demás departamentos es bien conocido. Que los de recursos humanos son odiados por gran parte de los empleados es lo habitual. Esto es lo referente a las funciones dentro de la empresa u organización. Si a esto se le suman las diferentes personas, con sus estilos, ambiciones, grandezas, mezquindades, altruismo, deseos de venganza, deseos de poder, etc. Tenemos el zoo resultante que precisamente genera esas luchas internas y esas divisiones entre las familias, de las que nos previene este Evangelio.
No es objeto de esta reflexión dar posibles soluciones, o recomendaciones para evitar estas situaciones. Sólo pretendemos resaltarlas, hacerlas visibles, ponerles foco y constatar su existencia. No tener en consideración esta realidad (¿humana?) puede hacer fracasar en buena medida las estrategias, objetivos y planes para pelear y triunfar en el mercado.
No tener en cuenta estas tensiones internas, puede conllevar a que la “ecuación” del plan de batalla de la marca, y su ejecución en el mercado esté condenada la fracaso.
La organización funcional y Taylorista de las empresas está en el origen de este problema. Es ese reparto de funciones, que funcionó en la época industrial, el que no funciona ahora, y el origen de gran parte de estas luchas y divisiones. Este asunto de la estructura de una empresa es “relativamente” fácil de solucionar, modificando los organigramas hacia estructuras más “caórdicas”, matriciales, orientadas la los proyectos, a los clientes.
La otra importante fuente de estas luchas y divisiones es la propia naturaleza humana, con su cerebro límbico, con su “hidden brain” como diría Vedantam. Además del “perfil” de las personas que se seleccionan en las empresas, en especial para los puestos directivos. Este es ya otro asunto de mucho mayor calado, y ¿tal vez? … ¡sin solución!

Resumen:
        En toda organización, el castigo a la lucha interna, a la división es: la desaparición.
        ¡Usted verá lo que hace!


Luis Mª García Bobadilla.
Ventas. Marketing (Experiencias, Neuro). Distribución. ¡Vino! Escritor .Cristiano. Liberal (Hayek) ¡Es la economía! Esencialista (Minimalista). Rioja.
Profesor Universidad Rey Juan Carlos (Madrid).

Autor del libro “+Ventas”. Editorial Esic.Libro ebook E=mc2 Fórmulas Mágicas!:
http://www.venderomorir.com/Contenidos/Archivos/ebook%20Emc2%20fm!%20%20Luis%20Maria%20Garcia%20Bobadilla%20Enero2015.pdf
www.venderomorir.com.

1 comentario:

  1. Totalmente de acuerdo Luis!!! Perfecta radiografía del zoológico, para el que en algunos casos no hace falta pagar entrada en la actualidad. El anteponer intereses personales al bien o fin común de una organización lleva a la ruina-desaparición. Es un acto de responsabilidad no cometer esa torpeza. Esto ocurre a menudo por no tener al cliente en el centro de nuestras actuaciones y n la toma de decisiones. Pero, somos personas, verdad? Llenos de errores y alguna virtud. Muchas gracias Luis por compartir tus reflexiones y, sobre tofo, SEGUIR INSPIRANDO!

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